EL DA VISTA AL CIEGO

ÉL DÁ VISTA AL CIEGO

MAT. 9:27-31

Uno de los propósitos por los que el Señor vino a la tierra fue para darnos vida abundante. El utiliza diferentes formas y una de ellas es devolver la vista al ciego (espiritual) que no ve lo que Dios hace. Sin embargo, para que la vista sea recobrada, hay algunos requisitos que tenemos que cumplir.

1. Tener fe activa (Mat. 9:27-31)
Estos ciegos caminaron y siguieron a Jesús, antes de haber recuperado la vista (caminar sin ver). Es decir, tener fe pero también actuar en base a esa fe.

2. Perseverar buscando (Mat. 9:27-31)
Otro detalle importante en este pasaje es que los ciegos siguieron a Jesús hasta la casa y después El los atendió. Aplicado a nuestra vida, entendemos que debemos de buscar a Dios constante y continuamente sin desmayar, y esto trae como resultado la bendición de recuperar la visión espiritual y gozar de las maravillas de Dios.

3. Siendo liberado (Mat. 12:22)
Aquí, nos muestra cómo espíritus inmundos o demonios pueden estar impidiendo que una persona pueda ver. Pero que bendición es saber que el Señor tiene el poder y la voluntad de liberarnos de ese impedimento. Debemos buscar la Ministración de Dios que nos libere de cualquier estorbo y recobrar la vista.

4. Ponerse a los pies de Jesús (Mat. 15:29-31)
El postrarse a los pies del Señor tiene varios significados.

--Aprender Escudriñar su Palabra y ponerla por obra.
--Adorar Rendir nuestra voluntad y ofrendarnos a Dios.
Ofrendar sacrificio de adoración.
--Retenerlo No perder la presencia del Señor. Buscar estar siempre con El.

Vemos que María, la hermana de Lázaro, hizo estas tres cosas y fue llena la de bendición del Señor. Al estar postrados a sus pies, el Señor nos devuelve la vista.

5. Despojarse de lo que nos identifica como ciegos (Mar.10:46-52)
El ciego al dirigirse a Jesús, arrojó su manto, el cual le identificaba como ciego, le era útil en su ceguera. Esto nos enseña que para recobrar la vista es necesario despojarnos de aquello que nos caracteriza como ciegos. Lo podemos ver de dos formas:

-Rechazar nuestra propia solución (Renunciar al humanismo).
-Quitar coberturas de pecado (evitar ser guiados por ciegos).

6. Comiendo pan con el Señor (Luc. 24:43-45)
Sentándonos a la mesa con el Señor seremos liberados de las vendas que impiden que veamos la grandeza de Dios. Esto quiere decir que por medio de la Santa Cena recobramos la visión espiritual. Podemos agregar que el comer el pan con el Señor también significa el ser alimentados por la palabra ungida, que cambia nuestra vida, que nos liberta.

Busquemos con todo nuestro corazón, tener la actitud correcta que traiga como resultado el que nuestra visión permanezca libre de estorbos, que nuestros ojos esten siempre abiertos y así poder apreciar las maravillas que Dios tiene para nuestra vida y deleitarnos en esa vida abundante que El nos ofrece.