LAS SEÑALES DE LA VIDA
MAT 24:3-13
La palabra de Dios nos muestra en diferentes porciones, cuales son las circunstancias en las que el mundo estará viviendo cuando ocurra la venida del Señor.
El mismo Señor Jesucristo habló acerca de ese tema y les enseñaba a sus discípulos (nosotros somos ahora sus discípulos), para que ellos estuvieran preparados para reconocer las señales que se presentarían antes del fin.
En la cita mencionada arriba, el Señor nos enseña acerca de eventos que debemos conocer, evaluar y por medio de ello prepararnos para su venida, la cual se encuentra muy cercana.
¨Qué acontecimientos ocurriran antes de su venida?
1. Falso avivamiento: v. 5
En los últimos tiempos habrá un "boom religioso" Es decir que la religiosidad aumentará y todos dirán que su religión conduce a la verdad. Esto es algo que ya se está experimentando. En todo el mundo hay una gran cantidad de sectas idolátricas y heréticas y una grande espectativa por los temas religiosos. Hay un "despertar" religioso, una falsa búsqueda de Dios, unida con aspectos espectaculares, señales, que arrastran al engaño a mucha gente.
2. Violencia: v.6
La violencia es una característica que se introduce en todas las áreas de la vida humana. Diariamente hay noticias acerca de hechos violentos de diversas naturaleza. Hay violencia en la sociedad (delincuencia, relaciones interpersonales), en la escuela, en los hogares y en los trabajos. Realmente el mundo ya está inundado por un espíritu de violencia generalizada, que busca involucrar a los cristianos atacándolos desde diferentes puntos.
3. Streess: v.6
La misma violencia y otros aspectos tales como el encarecimiento de la vida, el deterioro de las instituciones existentes, el poco respeto al ser humano y otros, han llevado a la mayoría de personas a un nerviosismo y zozobra de tal magnitud que pasan su vida bajo angustia y ansiedad. El stress se ha enseñoreado del ser humano y lo ha atrapado con sus poderosas cadenas. Este nerviosismo logra su objetivo a causa de la falta de confianza en Dios y al hecho de poner la vista en las cosas que ocurren en la tierra sin reposar en el Señor. Lo peor es que esta situación afecta no sólo a personas inconversas sino también a los hijos de Dios.
4. Lucha racial: v.7
Al decir nación contra nación, se refiere al enfrentamiento de étnias, es decir raza contra raza. No podemos pasar por alto el hecho que en los últimos años, las guerras que se han suscitado alrededor del mundo han tenido orígen racial. Este enfrentamiento, según pronósticos de los conocedores del tema, se continuará dando en diferentes lugares del mundo. Ejemplos: los problemas en Sudáfrica, Yugoslavia, y en América.
5. Reino contra reino: v.7
A simple vista, podría decirse que este verso se refiere al enfrentamiento entre monarquías. Sin embargo las pocas monarquías existentes no tienen ningún poder verdadero, son solamente simbólicas, por lo que concluimos que el Señor, no se refiere a ellas. Los reinos que actualmente existen y se encuentran en franca oposición son el reino de la luz y el reino de las tinieblas. Es a éste enfrentamiento al que se refería el Señor.
La lucha entre el bien y el mal se intensifica cada día y nosotros somos parte del Ejercito de Dios que se encuentra librando esa batalla. Diariamente nos encontramos involucrados en lucha abierta contra las obras de maldad y este enfrentamiento se ha de hacer más fuerte a medida que el tiempo de nuestra redención se acerca.
6. Hambres y terremotos: v. 7M
Resulta innecesario el decir que esto se está cumpliendo ahora mismo.
7. Descenso del amor: v.12
Este verso se refiere al cristiano que debido al asedio de las cosas ya mencionadas o por su falta de comunión con el Señor, se ve afectado en su nivel de amor. Al descender el amor, desciende la fidelidad, se pierde la visión, se toman senderos equivocados, y hay cambio de prioridades.
No obstante la cantidad de cosas que se opondrán a que el hijo de Dios llegue a alcanzar la meta que El le ha trazado, la Palabra nos deja ver (v.13) una tabla de salvación de todas estas cosas, y es la perseverancia, el permanecer unidos al Señor, es lo que nos garantiza nuestra salvación.
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